El hormigón se ha convertido en uno de los protagonistas cuando de revestimientos se trata. La razón es muy simple, es resistente, duradero y si se trabaja bien puede ofrecer hermosos resultados. Si tienes un suelo de hormigón, sea en el exterior de tu casa o incluso en el interior, probablemente te estés preguntando si lo limpias de la forma correcta. Hoy te contamos cómo limpiar el suelo de hormigón para dejarlo impecable.

Pasos para limpiar el suelo de hormigón de forma efectiva

Que el hormigón sea resistente y duradero no quiere decir que no requiera de un poco de cariño de vez en cuando. Limpiarlo, además hacerle mantenimiento regular, es el secreto para que se mantenga en óptimas condiciones y hermoso por mucho más tiempo. Así que vamos a ver cómo limpiar los suelos de hormigón a continuación.

Elimina el exceso de polvo

Puede parecer muy obvio pero sí, el primer paso para limpiar el suelo de hormigón es eliminar el exceso de polvo. Esto puede hacerse con una escoba, e incluso con una sopladora. Si tu suelo es de hormigón impreso, querrás prestar especial atención a las uniones y formas que estén impresas, ya que es allí el lugar donde se acumula mayormente el polvo.

De esta misma manera, asegúrate de eliminar cualquier residuo que pueda haber, no es demasiado raro encontrarse con hojas de árboles, o cualquier otro desperdicio, así que encárgate de eso primero para dar el siguiente paso.

Emplea agua o rastrillos

Como ya lo hemos dicho, los suelos de hormigón en ocasiones pueden hacer un poco compleja la tarea de eliminar las hojas y los residuos grandes. Si te identificas con esta situación, es posible que desees una solución más sencilla. Puedes emplear un rastrillo, para arrastrar los desperdicios hasta un solo lugar para que sea más sencillo recogerlos. También puedes emplear una manguera con agua a presión, para igualmente ayudar a trasladar los residuos a un solo lugar donde puedas recogerlos con más comodidad.

Quita las manchas profundas

Al tratarse de un suelo considerado como duro, muchas personas le atribuyen una gran resistencia ante las manchas. Lo cierto es que de igual manera su apariencia se puede ver desmejorada por ello, por lo que no es recomendable dejar que se manchen. Para ayudar a remover las manchas profundas, puedes emplear algún jabón líquido o detergente de cocina. Lo ideal es que lo viertas directamente sobre la mancha y que luego de algunos minutos de dejarlo actuar aclares con un poco de agua. Habiendo aclarado, el siguiente paso es frotar un poco con un cepillo, hasta que la mancha haya salido. Puedes repetir esto cuantas veces sientas que es necesario.

Aplica un esmalte protector

Esto es algo opcional, y forma parte del mantenimiento que se aplica a los suelos de hormigón de forma regular. Vale la pena destacar, que por muy resistente que sea un suelo de hormigón, este no es indestructible, por lo que requiere algunos cuidados para conservarse en buen estado el mayor tiempo posible. El vertido del esmalte o barniz protector, debe hacerse cuando ya el suelo esté limpio y seco, y se recomienda dejar secar muy bien antes caminar sobre él.

Barre varias veces a la semana

Cuando ya hayas hecho la limpieza profunda del suelo, el mejor consejo que podemos darte es que te dispongas a barrerlo varias veces a la semana. De esta manera evitas que se acumule de forma excesiva la suciedad. Con esto te ahorrarás unas cuantas limpiezas profundas.

¿Lo haces tú o contratas un servicio de limpieza a domicilio?

Puede que tus ocupaciones te impidan dedicarte de lleno a limpiar el suelo de hormigón de tu casa, si esto es algo que de verdad te está sucediendo entonces deberías comenzar a considerar contratar una empresa de limpieza. Disponer del trabajo de una empresa es encontrarte con la tranquilidad de disponer de servicios como la limpieza del suelo de hormigón, además de limpieza y lavado de colchones a domicilio, limpieza por horas y mucho más.

Contratar un servicio de limpieza para limpiar el suelo de hormigón te ofrece la garantía de obtener resultados de primera, y además saber que le estás dando a esta superficie la cualidad de extender su vida útil. Entonces, tienes dos opciones, o poner manos a la obra o dejarle el trabajo pesado a los profesionales, si nos preguntas a nosotros, te recomendamos la segunda opción.